Después de mi visita al Raykage, me preparé con lo necesario para partir a Iwa. El viaje será largo, así que ordené las armas y mucha arcilla conmigo. Después de mi pequeña inspección , me dirigí a la entrada de Kumo.
Con arcilla en mis manos y con la habilidad de éstas, creé un Kibaku, de un tamaño regular , cosa que pudiese montarlo.
Acaricié su lomo, sonreí.
- Ahora partiremos mi pequeño Kibaku.
Me subí a su lomo y sin perder tiempo , nos encaminamos a Iwa, mirando por última vez la entrada de mi querido Kumo.
Con arcilla en mis manos y con la habilidad de éstas, creé un Kibaku, de un tamaño regular , cosa que pudiese montarlo.
Acaricié su lomo, sonreí.
- Ahora partiremos mi pequeño Kibaku.
Me subí a su lomo y sin perder tiempo , nos encaminamos a Iwa, mirando por última vez la entrada de mi querido Kumo.